(Recibido 30/11/17)
“El mundo es una iglesia petulante codiciosa y limosa donde todos tienen
un ídolo para adorar cual fetiche y un altar al cual sacrificase.”
(R. Novatore, El reino de los fantasmas)
El compañero Renzo Novatore, pseudónimo de Abele Rizieri Ferrari, nació
un 12 de mayo de 1890 en Arcola, localidad italiana ubicada en la
provincia de La Spezia. Representante del “anarquismo iconoclasta”,
luchó con ideas y armas contra el poder hasta que fue abatido a balazos
por los carabinieri en un tiroteo ocurrido el 29 de noviembre de 1922.
Al leer y analizar las ideas y acciones de Renzo Novatore en la
actualidad podemos interpretarlo desde varias perspectivas, pero desde
un óptica anarco-nihilista podemos reconocer su gran aporte en dar
contundencia a todo el entramado de discursos y prácticas iconoclastas –
individualistas – nihilistas – anarquistas.
Entre ellas se encuentra principalmente la crítica a la sociedad
(cualquiera esta sea) como lugar de origen de los vicios de la
humanidad. Además, la interpretación que realiza el compañero en sus
escritos sobre la vida misma como algo que hay que amar en su conjunto
de contradicciones, la prioridad del yo ante todo, no como un mero
ejercicio de egocentrismo o desprecio hacia el/la otrx, sino mas bien
como la construcción del Ego, que se podría explicar simplemente como la
idea que hoy conocemos como el “ser tu mismx”, el amor por la
naturaleza, el placer por la destrucción, el despojo de todos los
valores morales, y el placer, sí, el más puro placer que nos entrega
arrojarnos a la nada.
Porque la relación es directa entre dependencia e individualidad,
mientras más dependiente, se es menos individua/o y viceversa. De esta
manera, el último reducto de la libertad está en cada unx de nosotrxs,
más allá y por encima de cualquier mayoría o acuerdo.
Bajo el falso esplendor de la civilización democrática, los más altos
valores espirituales han caído rotos en pedazos.
La fuerza volitiva, la individualidad bárbara, el arte libre, el
heroísmo, el genio, la poesía, han sido objeto de burla, ridiculizados,
calumniados. Y no en nombre del “yo”, sino de la “colectividad”. No en
nombre del “único”, sino de la “sociedad”
(R. Novatore. Hacia la nada creadora)
Estas, son sin dudar un conjunto de ideas que podemos reconocer como
grandes aportes e influencias a la senda por la que algunxs -siempre
pocxs- transitamos.
Novatore no es sólo autor de diversos escritos teóricos y agitativos,
también lo es de numerosas acciones y expropiaciones en su imparable
lucha contra toda forma de autoridad. Por lo que el reconocer a
Novatore como parte de una historia de lucha en ofensiva contra el
poder, es reconocernos a nosotrxs mismxs como parte de esta historia. Es
hacernos participes de la guerra contra toda autoridad y dominación por
la destrucción de todos los valores morales y entender al individuo como
parte fundamental del desarrollo de nuestras vidas como el inicio de
todas nuestras negaciones y contradicciones.
Que la nada y el todo ya no sea un juego de palabras bonitas con los
cuales rellenar panfletos y consignas, que así como el panfleto y la
consigna necesitan estar acompañados de acción para ser coherentes,
llevemos nuestras ideas a la práctica.
De nada sirve el nihilismo vacío y pasivo, estrellemos la tendencia
anárquica con las practicas nihilistas tal cual gran colisión de
estrellas en una oscura noche que impulsa caóticamente la conspiración.
Hoy, ya son muchos los y las Bruno Filippi y Renzos Novatore que se
arrojan al devenir de las tendencias antisociales, desde Chile hasta
Grecia y por todos los rincones del mundo la guerra continua..
¡Hasta que todo lo existente sea destruido.. por el triunfo del yo y la
derrota del poder !
!Renzo Novatore, presente!